Éxito

  

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ÉXITO

-Emilio, te voy a hacer una pregunta obvia, ¿qué nos diferencia de los animales?

       -Los únicos objetivos de los animales son la procreación y la autoconservación, mismos que están prefijados genéticamente.

       -Así, encontramos que en invierno las aves emigran a climas más cálidas buscando su protección y emprenden sus vuelos de miles de kilómetros sin enterarse, como lo hacemos nosotros, de los reportes del tiempo por televisión.

       -Una ardilla nacida en primavera, sin que nunca haya experimentado un invierno, reunirá nueces para subsistir en esa estación.

       -Por otra parte, los seres humanos hemos avanzado hasta superar la etapa animal. Poseemos la facultad de la imaginación creativa que nos hace más que criaturas, somos creadores.

       -Debido a esta facultad creadora e imaginativa, nuestros objetivos no conocen límites.

-Hay mucha gente, que no utiliza esa facultad creadora e imaginativa que estas mencionando, son gente mediocre que se conforma como los animales en los únicos objetivos de procrearse y autoconservarse. ¿A qué se debe que no todos los seres humanos utilizan esa facultad creadora para prosperar y mejorar?

       -En el mesencéfalo existe una computadora, una grabadora de cinta, un servomecanismo automático, un mecanismo de éxito que cada quien puede operar como una computadora, como un mecanismo que se esfuerza por alcanzar los objetivos y que le ayuda a encauzar hasta hacia ellos.

       -Igual que un astronauta lanzado hacia su objetivo en algún punto muy lejano -y regresando a la Tierra- uno puede andar a tientas en el vasto espacio interior de su mente para descubrir su riqueza interna antes de regresar a sí mismo.

       -El cerebro que tenemos no sólo puede funcionar en forma automática, sino que también puede ayudarnos a adaptarnos a la vida en una forma más aceptable, dándonos la percepción en el comportamiento humano, con un fin avasallador a la vista: nuestra completa satisfacción como seres humanos que somos.

       -Esto no implica que el ser humano sea una máquina sino que el ser humano controla la máquina que posee.

       -Ahora, con respecto a tu pregunta, no todos los seres son exitosos debido a que, dentro de nosotros tenemos, además de un mecanismo de éxito, existe un mecanismo de fracaso.

       -Éste mecanismo de fracaso está compuesto de sentimientos frustrántes o negativos que nos lanzan fuera de curso, desviando nuestras inclinaciones positivas, empequeñeciendo nuestra autoimagen, bloqueando nuestros intentos por alcanzar nuestra plena realización como seres humanos dignos.

-¿No me podrías dar un ejemplo para que me quede más claro?

       -Sí como no. Por ejemplo, me siento a la mesa y tomo una cuchara. La levanto con la mano sin esfuerzo. Pero, ¿fue siempre así? No, claro que no. Cuando niño sin duda dejé caer muchas veces la cuchara hasta que aprendí cómo sostenerla. Después olvidé los muchos fracasos al levantarla, pero recordé en qué tuve éxito, almacené esto en la grabadora de mi mente... y ahora sostengo la cuchara con éxito.

       -Así, para alcanzar un objetivo ahora, recurres tú a tus experiencias, el total de las cuales están  almacenadas en la computadora de tu mesencéfalo. Si acudes a tus éxitos pasados, reanimas tu confianza para tener éxito en el presente. Pero si recurres a los fracasos del pasado, te derrotas a tí misma.

       -Si uno se mueve hacia el fracaso, distorsiona uno su propia autoimagen. Te disgustas y desconfías de ti misma. Dejas de guiarte en forma adecuada.

-¿Cuál es la solución?

       -Supérete; deja de degradarte. Véte en tus mejores momentos; no dejes que el éxito muera. Sigue visualizando esos buenos momentos -no importa que sean pocos- y céntrate tenazmente en esas maravillosas imágenes de éxito hasta que logres incorporarlas a tu personalidad básica.

       -Tu vives en dos mundos. En uno de ellos ves tinieblas y abatimiento, frustraciones y fracasos, y la catástrofe siempre está acechando. En el segundo mundo contemplas el brillo del Sol, el verdor de los campos, el azul del cielo, tus prospectos brillan más a cada momento.

-¿Podrías hacer una síntesis de lo que me acabas de decir?

       -Encontramos la evidencia de que los seres humanos estamos dotados con un servomecanismo más maravilloso que cualquier cerebro electrónico o sistema orientador que haya inventado el ser humano y que funciona con los mismos principios básicos.

       -Estamos dotados de un dispositivo integrado que se esfuerza por alcanzar metas y por medio del cual las logramos.

       -En último análisis, esto nos haría elevarnos por arriba del mero aspecto físico de sobrevivir a una forma de vida satisfactoria y próspera.

       -Proyectémonos a este segundo mundo de felicidad. Hagámoslo uniéndonos para llegar a nuestros objetivos.

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