0539 811 02
La Pascua es una fiesta originada por los judíos y fue tomada por los cristianos. Es la fecha más importnte por ser referencia de muchas festividades en ambos calendarios litúrgicos.
La palabra Pascua deriva de PESACH que en hebreo significa "pasar por alto" y figuradamente "mostrar misericordia" y tiene profundas raíces en el impulso primitivo del ser humano para marcar tiempo con significado sacro y ritual.
-¿Qué tiempo ?
Tiempo correspondiente a ciclos naturales inexorables de luz y oscuridad; trabajo y descanso; nacimiento, crecimiento, decaimiento y muerte.
El ser humano en algún momento empezó a dar atención consciente a todos estos fenómenos así como a su constante repetición.
Dos ciclos relacionados entre sí tuvieron importancia primordial en la formación de los calendarios religiosos. Uno corresponde a las fases de la Luna y los equinoccios solares. El otro las sucesiones periódicas de las estaciones de la naturaleza que determinan tiempos de sembrar y tiempos de cosechar.
Los cristianos usaron el calendario judío durante tres siglos y continuaron con el festejo del día de Pascua aunque con un caris diferente.
Al cambiar los romanos el calendario lunar-solar de los judíos por uno solar se afectó la sucesión de la Pascua por no coincidir en el mismo día en los años siguientes.
En el año 325 de nuestra era en el Concilio de Nicea se decidió que la Pascua debía caer en el domingo después de la primera luna llena después del equinoccio de primavera.
La fecha del equinoccio de primavera correspondía al 21 de marzo. Sin embargo era luna llena no es la luna llena actual sino una fícticia llamada "luna llena Pascual". El resultado es que la Pascua no corresponde hoy en día a un día específico del calendario gregoriano pudiendo caer en cualquier fecha entre marzo 22 y abril 25.
Los cristianos nunca se han puesto de acuerdo en la la fórmula exacta con la que debe calcularse la fecha de Pascua.
Esta cuestión fue una de las rezones del sisma entre la Iglesia Católica de Occidente y la Iglesia Ortodoxa de Oriente.
El antiguo calendario litúrgico judío era un calendario con meses lunares surgido de la vida nómada primitiva de los judíos con su festival principal en la primera luna llena de primavera conocida después como la Pascua.
El año litúrgico judío sufrió transformaciones sucesivas en función a una serie de conmemoraciones históricas asociadas con los actos divinos de la Creación y la Redención de los judíos.
Posteriormente los judíos por haber dejado de ser nomadas se vieron en la necesidad de adoptar el calendario lunar-solar de los babliónios que de hecho es todavía la base del calendario judío de hoy en día.
La ventaja de este calendario es que las fechas específicas caen ligeramente atrás o ligeramente adelante en el año solar dependiendo de si se ha o no intercalado un mes lunar extra.
Después del asentamiento de las tribus judías, fueron los festivales agrícolas dependientes de las primeras y últimas lluvias, los primeros frutos de Pacua, la primera siega en la fiesta del Pentecostes y la última siega en la fiesta de Tabernáculo, lo que se celebró en el año litúrgico.
La Pascua conmemora para los judíos dos cosas: primero, el día en que Dios los sacó de Egipto, por mano de Moisés, para llevarlos a Canaán, la tierra de promisión; la segunda, al cordero o víctima del sacrificio.
Moisés instituyó la Pascua y por estatuto perpetuo todos los judíos debían celebrarla.
Si alguien por alguna razón justificada no podia celebrar la Pascua en la fecha establecida, tenía permiso para celebrarla en el segundo mes, pero si el decuido era vountario, el infractor era castigado con la muerte. A las mujeres se les permitía participar en la celebración pero no tenían obligación de hacerlo.
La Pascua se celebraba a la puesta del Sol el día 14 del mes de Abib o Nisán. Este era el primer mes del calendario judío el día 14 concidía con la noche de luna llena. El día 10 de ese mes cada familia debía apartar un cordero o un cabrito macho de un año, sin defecto alguno. Si la familia era pequeña se podían juntar varias familias para las que un cordero fuera suficiente. El cordero debía ser inmolado y con su sangre untarse en los postes y el dintel de las casas, en recuerdo de que un día así se había evitado que el ángel de la muerte matara al primogénito de cada familia judía.
El cordero debía asarse, y su carne comerse con hierbas amargas y panes sin levadura. El padre de familia era quien presidia la celebración, y Moisés dio órdenes precisas para que al preguntar los hijos qué era la Pascua el padre les explicara su significado. Debía recalcarse la intervención amorosa y poderosa de Dios al dar libertad a los judíos. Lo que sobrara del cordero debía quemarse aquella misma noche, y no se le debía quebrar los huesos.
Aunque la Pascua debía celebrarse todos los años, en el Antiguo Testamento solo se registran algunas de estas celebraciones: la que se celebró en Egipto; una en el desierto del Sinaí; otra, la primera en Canaán; la del rey Salomón; la del rey Ezequías; la del rey Josías ; y otra que se celebró después de la cautividad.
En la actualidad los judíos todavia celebran la Pascua, pero solamente con panes sin levadura, hierbas amargas y sin sacrificio de cordero.
La principal fetividad del calendario litúrgico cristiano es la Pascua que celebra la Resurrección de Cristo en el tercer día después de su crucificación.
La Pascua ocurre en un domingo particular, pero su importancia se enfatiza en el culto de la Iglesia por la larga preparación de la Cuaresma, la Semana Santa y por las siguientes 7 semanas hasta el Pentecostes.
Los cristianos occidentales celebran la Pascua en el primer domingo después del equinoccio de primavera (marzo 21). Si la luna llena ocurre en un domingo, el día de Pascua es el domingo posterior. La Pascua, por lo tanto, puede caer entre marzo 22 y abril 25. Esta regla se fijó después de mucha controversia o insguridad, actualmente se efectúa un cálculo ligeramente diferente basado en números dorados y letras domincales con el resultado de que la Pascua ortodoxa algunas veces coincide con la de los cristianos de occidente y a veces puede caer hasta cinco semanas después.
En el siglo XX existió la posibilidad de que la fecha de la Pascua se fijara en una fecha exacta. Se ha venido discutendo en que coincida en el segundo domingo del mes de abril. Sin embargo, ello depende de que se pongan de acuerdo los jerarcas de las distintas religiones cristianas.
Según el Nuevo Testamento, Cristo reune las condiciones del Cordero Pascual: él es el Cordero de Dios inmolado por la libertad espiritual de los cristianos. En él no hubo mancha alguna, se ofreció voluntariamente, no le fueron quebrados los huesos. Los panes sin levadura simbolizan la limpieza moral con que los cristianos deben acercare a la mesa.
En el Nuevo Testamento se mencionan varias Pascuas a las que Cristo asistió, y especialmente la que para él fue la última, la noche de la víspera de su muerte. Después de participar con sus discípulos en la celebración de su última Pascua, usando los elementos del pan y del vino, estableció para los cristianos la fiesta correspondiente a la Pascua judía. Esta cena conmemora hoy la muerte de Cristo en la cruz, mediante la cual los cristinos son libres y salvos por la fe.
----------------------------------------------------
jueves, 27 de octubre de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario