Libros a la Hoguera

 

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LIBROS A LA HOGUERA

-En la noche del 10 de mayo de 1933, unos tres meses y medio después de que Hitler llegara a ser canciller jefe de gobierno alemán, ocurrió en Berlín una escena que no había sido presenciada en el mundo occidental desde finales de la Edad Media. 

-A eso de la medianoche, un desfile de antorchas de miles de estudiantes terminó en una plaza de la avenida Unter den Linden. Las antorchas fueron aplicadas a un gran montón de libros que habían sido apilados allí, y cuando las llamas los envolvieron, fueron arrojados más libros al fuego hasta que unos 20 mil se consumieron en la hoguera. Escenas similares tuvieron lugar en otras ciudades. La quema de libros había comenzado. Muchos de los libros arrojados a las llamas en Berlín esa noche por los alborozados estudiantes, bajo la mirada aprobadora del doctor Goebbels, habían sido escritos por autores de reputación mundial. 

-Entre ellos están, sólo entre los escritores alemanes, Thomas y Heinrich Mann, Lion Feuchtwanger, Jakob Wasserman, Arnold y Stefan Zweig, Erich Maria Remarque, Walter Rathencu, Albert Einstein, Alfred Kerr y Hugo Preiss (este último, el erudito que había redactado la Constitución de Weimar). 

-Pero no sólo fueron quemados los libros de escritores alemanes. Muchos autores extranjeros fueron también incluidos en la lista: Jack London, Upton Sinclair, Helen Keller, Margaret Sanger, H. G. Wells, H. Ellis, A. Schnitzler, Freud, Gide, Zola, Proust... 

-En palabras de una proclama estudiantil, quedaba condenado al fuego cualquier libro que "obre subversivamente contra nuestro futuro o ataque las raíces del pensamiento alemán, la patria alemana y las fuerzas impulsoras de nuestro pueblo". 

-Goebbels, ministro de propaganda, que desde ese momento pondría a la cultura alemana una camisa de fuerza nazi, habló así a los estudiantes cuando los libros se estaban convirtiendo en cenizas: 

"El alma del pueblo alemán puede de nuevo expresarse por sí misma. Estas llamas no sólo iluminan el final definitivo de una vieja era: iluminan también a la nueva"... 

-El presidente de la Cámara de Teatro del Reich era un tal Hans Johst, autor dramático fracasado que una vez se jactó públicamente de que siempre que oía a alguien mencionar la palabra "cultura" sentía ganas de sacar su revólver. De esa época nos han llegado fotografías en que se ven los rostros brillantes de los jóvenes nazis enfundados en sus camisas pardas y con la cruz gamada en el brazo izquierdo, arrojando los libros a una hoguera enorme y elevadísima. Los rodean funcionarios del partido y alemanes anónimos cuyas miradas expresan tranquilidad y satisfacción. 

-Un fotomontaje de John Heartfield muestra a Goebbels cuando, iluminando por las luces de la noche (es decir, las llamas del Reichstag y de la pila de libros) loa a la Nueva Alemania con el brazo en alto. 

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William I. Shirer HISTORIA DEL III REICH (Océano, Barcelona, 1980, tomo I, página 275 y siguientes.) ——————————————————————