martes, 2 de diciembre de 2008

Alcoholismo

01. ¿Cuál es la principal diferencia entre el alcohólico y el hombre que toma unas copas cuando está en buena compañía?

El bebedor normal, cuyo número aumenta de día en día en todas partes, recurre al alcohol para calmar el ánimo y escapar temporalmente a las procupaciones diarias. Pero pasarse toda la noche bebiendo con este fin es ir demasiado lejos.
La pérdida del dominio sobre sí mismo es el límite que separa al alcohólico del que no lo es. Mientras el bebedor normal puede dejar de beber cuando lo desea, el alcohólico es incapaz de hacer otro tanto. Una vez que empieza, sigue bebiendo hasta perder toda conciencia de sus actos o hasta que alguien se lo impide.
Muchos alcohólicos dicen: "Puedo dejar de beber en el momento en que quiera". Y dan una serie de excusas, a las que llaman rezones, para explicar por qué no dejan de beber. Y a menudo se asombran al ver que, cuando quieren hacerlo así, no lo consiguen. Entonces se alarman y siguen bebiendo para ahuyentar su mierdo; en esta forma son de Nuevo presa de la bebida.

02. ¿Hay algún límite de seguridad dentro del cual debe mantenerse quien bebe cuando se halla en compañía?

Puede decirse que 60 cc. De whisky o medio litro de cerveza no afectan a una persona, por ejemplo, cuando trata de conducir un automovil. Pero es necesario tener en cuenta el tiempo que necesita el organismo para quemar el alcohol. El porcentaje de éste en la sangre aumenta a medida que se bebe. Si no se aguarda hasta que se haya quemado antes de tomar otra copa, ese tanto por ciento aumentará mucho. Por eso, tomar tres copas en rápida sucesión puede embriagar mucho más rápidamente que el beberlas en el curso de varias horas.



03. ¿Existen normas razonables para beber?

Un hombre normal que pese 70 kilos puede quemar 30 cc. de whisky, o aproximadamente 15 cc. de alcohol por hora. Si una persona sana se limita a beber según tal escala, no se emborrachará, porque no acumulará alcohol en su organismo más rápidamente de lo que éste puede quemarlo.

04. ¿Qué piensa usted de los cocteles tomados a la hora de almorzar?

Desgraciadamente constituyen un hábito que considero peligroso.
El alcohol es un anestésico, un sedativo.
¿Qué objeto tiene esa acción sedante y anestésica a mediodía?
Yo creo que, cuando se bebe a la hora del almuerzo, se reduce la capacidad para el trabajo de la tarde.

05. ¿Aumenta este hábito el riesgo de volverse alcohólico?

En mi opinion, quien comienza a beber durante el día, sin que medie algún compromiso social (y un almuerzo por razón de negocios no es una ocasión social), está bebiendo anormalmente.
Y esto puede constituir un primer indicio de alcoholismo.
Sin embargo, adviértase que no digo que todo el que tome un coctel a mediodía sea necesariamente alcohólico, ni siquiera alcohólico incipiente.

06. ¿Qué síntomas anuncian la presencia del alcoholismo?

El beber inmoderadamente es presagio de alcoholismo.
Todo hecho negativo (aunque sea trivial una disputa o una pelea a golpes), de resultas de que una persona haya bebido algunas copas, denuncia a ésta como bebedor inmoderado.
El alcoholismo es insidioso, y muy difícil de reconocer como tal en un principio, que es cuando debe reprimirse.
Una respuesta afirmativa a cualquiera de las siguientes preguntas puede constituir una señal de peligro:
¿Se da usted a menudo a la bebida?
¿Comienza el día bebiendo?
¿Roba usted tiempo al trabajo o a sus deberes a causa de la bebida?
¿Bebe usted a solas?
(Entiendo por ello hacerse de una botella y sentarse a beber estando solo.)
¿Siente usted la necesidad de una copa, ya para hacer frente a ciertas situaciones, antes de afrontar un problema importante, o a determinada hora del día?
¿Suele sufrir lagunas mentales cuando bebe?
¿Censuran su afición al alcohol las personas que se interesan por su bienestar?
(Tal censura es indicio importante, pues el alcohólico es el último en darse cuenta de la situación en que se encuentra.)
Las lagunas que he mencionado (diferentes de la privación de sentido ocasionado porque la bebida haya hecho un efecto anestésico excesivo) constituyen un síntomas particularmente revelador y peligroso.
Una laguna es un período de amnesia, pérdida de memoria, en este caso resultado de la bebida.
La persona anda, habla y obra, pero luego nada recuerda.
Esto les pasa a menudo a los bebedores empedernidos.
Es uno de los primeros y más importantes síntomas de alcoholismo y se le debe prestar cuidadosa atención. Todo el que sufre una de estas lagunas mientras bebe ha de consultar al médico inmediatamente.

07. ¿Cuánto tiempo tarda generalmente una persona en convertirse en alcohólica?

Algunas, probablemente un 10%, son ya alcohólicas desde la primera copa. Otras llegan a ese estado después de beber durante tres o cuatro años; hay quienes tardan de 15 a 20. Esto varía según la resistencia del individuo a los agents tóxicos, según la cantidad de alimento o bebida que tome, o el estado de su hígado, etcetera. También debo indicar que es un error creer que bebiendo solo cerveza no se corre el riesgo de convertirse uno en alcohólico. El alcohol es alcohol, no importa en qué forma se ingiera. Se pude caer en el alcoholismo bebiendo cerveza lo mismo que bebiendo vino o whisky.

08. ¿Es el hígado el principal órgano atacado por el exceso de alcohol?

El alcohol puede atacar todos los órganos, pero el hígado es el órgano encargado de desintoxicar el organismo; el alcohol es un tóxico, y todos los tóxicos pasan por el hígado. Así pues, claro está que el hígado es el que más afectado resulta.

09. ¿Afecta el alcoholismo principalmente a las personas de edad madura?

Hace unos diez años comprobamos que la mayor parte de los pacientes alcohólicos tenían entre 35 y 45 años. Hoy, como podemos identificar mejor los primeros síntomas, hallamos una tremenda cantidad de alcohólicos entre personas de 25 a 35 años. A medida que se extiende la educación antialcohólica hay cada día más alcohólicos que se muestran dispuestos a permitir que se les haga un diagnóstico.

10. ¿Se ha intensificado en los últimos años el problema del alcoholismo?

El tanto por ciento de alcohólicos no ha aumentado, pero sí su número, dado el crecimiento de la población. Muchos jóvenes menores de 18 años se convertirán en alcohólicos a menos que logremos hacerles comprender que no se debe considerar el alcohol como un sedativo o como una ayuda en nuestras crisis emocionales.

11. ¿Por qué cree usted que hay tanto alcoholismo en la sociedad moderna?
Si hubiera de señalar los dos factores principales, diría que el primero es nuestra tolerancia ante el comportamiento de los borrachos. El segundo es la insistencia con que se nos invita a que tomemos algo. En cualquier parte que nos encontremos nos ofrecen bebidas alcohólicas: durante la jornada de trabajo, en los almuerzos, en reuniones y asambleas.

12. ¿Cuáles son los países donde más se abusa del alcohol?

Francia aventaja en eso a todos los países, pues aproximadamente el 10% de su población sufre de alcoholismo. Los Estados Unidos, África del Sur, Chile y Australia comparten el dudoso honor de estar en segundo lugar, con un 6% de su población afectada.

13. ¿Cómo describiría usted un alcohólico?

La gente en general imagina a los alcohólicos como borrachines que frecuentan las tabernas y habitan en los barrios miserables, pero en realidad el 97% de ellos son personas que encontramos todos los días y figuran entre nuestros amigos, parientes y conocidos.
No siempre resulta posible reconocer al alcohólico a primera vista.
El método más interesante para clasificar a los alcohólicos y el que en mi opinión explica mejor el alcoholismo, es el ideado por el Dr. E.M. Jellinek, quien en vida fue probablemente la primera autoridad mundial en este asunto.
El Dr. Jellinek clasificó a los alcohóicos según formas determinadas de darse a la bebida.
Nombró los diferentes tipos con las cinco primeras letras del alfabeto griego.
1. Alfa
Alfa es el individuo sicológicamente necesitado de alcohol.
Bebe para dare ánimo.
Acaso necesite de valor para pedir a una muchacha que le conceda un baile, o para dominar su cortedad a fin de conversar desembarazadamente.
Quizá sea este el tipo más leve de alcoholismo.
Pero cuando los tejidos del sujeto Alfa empiezan a volverse tolerantes al alcohol, se ve obligado a aumentar la dosis a fin de lograr el efecto deseado.
Así es como comienza su dependencia del alcohol en lo físico.
Luego, si continúa bebiendo se convierte en dipsómano.
2. Beta
En este caso el alcohol obra como una droga sobre los tejidos del cuerpo.
En algunas personas produce un efecto desastroso en las paredes del estómago (lo que llamamos gastritis), o acaso produzca hinchazón en la envoltur de un nervier lo que provoke una neuritis o, si afecta a más de un nervio, una polineuritis.
El alcohólico tipo beta padece dolores provocados por el alcohol, y tal vez continúe bebiendo a fin de aplacarlos.
3. Gamma.
Yo calculo que el 90% de los alcoholícos pertenecen a esta clase.
Tienen todas las características del acoholismo: dependen sicológicamente del alcohol, beben más en cada ocasión, y lo hacen cada vez más a menudo; luego acaban por perder el dominio de sí mismos.
La tolerancia de sus tejidos al alcohol aumenta, y necesitan beber cada vez más para lograr el efecto que buscan.
Están ya a un paso de caer en completa esclavitud física: entonces el tipo gamma necesita verdaderamente de la presencia del alcohol en su torrente sanguíneo para que sus células funcionen.
4. Delta
Acaso aquí no exista dependencia sicológica alguna, aunque el individuo beba alcohol en cantidades excesivas durante largos periódos.
Pero, el uso prolongado y excesivo del alcohol, hace que dependa físicamente de él, y si se lo suprimen sufre síntomas análogos a los del toxícómano privado de su droga habitual.
5. Épsilon
Este es el tipo de bebedor que se entraga a juergas y francachelas.
Suele beber poco o nada entre ellas y luego cae en prolongadas orgías alcohólicas, que pueden durar días o semanas enteras.

14. ¿Requiere la cura del alcohollismo una abstinencia total?

No usamos el término "cura", porque daría a entender que el alcohólico puede volver a beber normalmente.
Esto nunca podrá hacerlo.
Nos limitamos a decir que se restablece.
La única forma conocida de que un alcohólico logre mantenerse sano es que deje de beber por completo.
Lo mismo que otros toxicómanos, no puede tolerar la droga a que se ha aficionado.
Pero sabemos que es factible el restablecimiento de alcohólicos si siguen al pie de la letra el tratamiento prescrito.
Millones de ellos se han restablecido; yo diría que tantos como los que aún padecen esa enfermedad.

15. Entonces, ¿aceptan los médicos, en general, la teoría según la cual el alcoholismo es una enfermedad?

Muchos médicos todavía ven en el alcoholismo un problema de conducta, algo que puede remediarse con fuerza de voluntad.
Pero esto seguro de que con el tiempo crecerá el número de facultativos que lo consideran una enfermedad.

16. ¿Tienen los médicos algún método nuevo para tratar el alcoholismo?

Hay muchos.
Algunas de las nuevas drogas tranquilizadoras son de utilidad.
Podemos suministrarmals suministrarlass en lugar de alcohol hasta que el paciente aprende a vivir sin éste.
Hay otras, como el Antabuse y el Temposil, que convierten el alcohol en veneno, de modo que la persona que las toma y sigue bebiendo se siente terriblemente mal, y eso la incita a abstenerse.
Si el alcohólico ingiere esas drogas, no tiene ya que luchar consigo mismo para resolverse a no beber; sencillamente no puede beber.
Una vez que ha pasado 24 horas sin probar alcohol y se da cuenta de que nada horrible le ha ocurrido, se siente animado a continuar absteniéndose de beber.

17. ¿Y si la persona se niega rotundamente a someterse a tratamiendo médico?

Si el alcohólico mismo no quiere que se le trte, a menudo resulta muy conveniente que su cónuge busque quien le ayude a encararse conel problema.
Entonces el paciente suele darse cuenta de su error y él mismo solicita que se le someta a tratamiento.
Sabemos por experiencia que el ctrratamiento es eficaz aunque sea impuesto.
No existen alcohólicos incurables.
A todos se les puede ayudar si se dedica a ello el tiempo y el esfuerzo necesarios.
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