lunes, 14 de julio de 2014

Radiestesia


0213 

RADIESTESIA

-Emilio, ¿crees tú en la radiestesia?

-Sí. La Ciencia se ha visto siempre obligada a reconocer la verdad. Pero antes de llegar a ella, siempre ha sabido inventar las palabras de censura, las palabras que tratan de matar. 
-La radiestesia no escapa a esta regla, pero no  sabe que todo pasa,  todo salvo la verdad, salvo la justicia, y sonrie  mirando al futuro, pues  sobra formularse su desquite.
-Esta cita de un Premio Nobel, Alexis Carrel, bien puede valer como espaldarazo a una de las más importantes sistemas de investigación que se ofrecen al espíritu humano.
“Todo mundo conoce el sexto sentido, pero nadie lo reconoce. Nuestros sentidos a oficiales son el oido, la vista, el tacto, el olfato y el gusto. Pero nuestro sexto sentido ni siquiera  tiene nombre. No obstante existe al igual que en los camellos y las aves que tienen instinto del agua; si se encuentran encima de un manantial subterráneo, una simple contracción muscular les advierte de su presencia”.
-En los tiempos prehistóricos, el hechicero o zohari era el individuo más inteligente de la tribu, capas no solamente de designar el mejor terreno de caza, sino de encontrar el manantial a cuyo alrededor se asentaría el poblado.
-2000 años antes de nuestra era los chinos, llegaron a ser expertos  en las investigaciones, concernientes al subsuelo, fuentes, yacimientos minerales, etc. Utilizaban un péndulo o bien una varilla ahorquillada compuesta por dos largos brazos. 


-Un emperador chino de la dinastía Hia tenia reputación de ser uno de los mayores hidrólogos de la antigüedad. Una xilografía que data del año 147 antes de nuestra era, nos lo muestra sosteniendo una horqueta y dice: “Yu, de la dinastia Hia, fue célebre por su ciencia sobre los yacimientos mineros y los fuentes” descubrio las objetos ocultos  y supo regular juiciosamente las labores de la tierra de acuerdo con los distintos estaciones.
-La Biblia contiene innumerables alusiones al bastón o a la varita, que, en forma de cetro, utilizaban los gobernantes.
-Moisés fue instruido en todas las ciencias y los secretos de los egipcios. Esto le permitió, entre otros prodigios, hacer brotar agua de la roca de Horeb, hallándose en pleno desierto. Para ella le bastó con golpear la piedra con su bastón de madera de almendro.
-El péndulo ya se conocía desde los tiempos de los antiguos faraones, pues se le ha encontrada en los tumbas  egipcias. Se le uso lo mismo que la varilla, pero su recconocimiento se verificó a finales del siglo XVIII. El pendulo llegó a convertirse en el instrumento habitual de los  zahories. Todavía lo es hoy debido a que su empleo es más práctico que la varilla.
-Un abate francés de nombre Alexis Bouly (1867-1958) es el “primer radioestesista del mundo” por la razón de que él inventó la palabra “Radiestesia”, que hoy a destronado casi totalmente la antigua designación de “zahori”. 


-Después de haber terminado sus estudios en Boulogne, de donde era originario, pasó a Arras, donde fue estudiante del seminario. El obate Bouly fue el superior de un colegio de Boulogne, hasta que en 1910 lo nombraron párroco de Hardolot. En ese pequeño estación balnearia del Paso de Calais fue donde se descubrió su vocación de zahori. 
-Cierto día un amigo zahori aficionoado le prestó una varilla y cual no sería su sorpresa al notar que la varilla empezó a agitarse frenéticamente en sus manos. Se encontraba en ese momento en las proximidades de una pequeña fuente. Esta experiencia lo dejó intrigado y desde entonces no cesó nunca de interesarse en esta extraña actividad que más tarde bautizaría como “Radiestesia” y que le valió una gran notoriedad. Localizó gran número de fuentes y también se distinguió por el descubrimiento de cementerios merovingios y subterráneos en los castillos feudales. 
-Por sus éxitos le valió ser llamado frecuentemente a otras países. Polonia, Rumania, Portugal y España. 
-Después de la Primera  Guerra Mundial 1914 -1918 el Ministerio de la Guerra Francés le encargó una misión muy peligrosa que consistió en buscar los obuses que no habían estallado en los campos de batalla.
-El gran mérito del abate Bouly consistió en detectar agua a grandes profundidades, determinando exactamente la importancia del depósito y su calidad. 
-A su renombre contribuía también la justeza de sus diagnósticos médicos. 
-De todas partes llegaban a consultarle. Viendo en él a un hombre de ciencia más que a un charlatán. Los médicos le ayudaban voluntariamente a realizar sus experimentos. 
-Él explicaba sus extraños poderes de la siguiente manera:
“Vivimos en un océano de radiaciones de las que no nos apercibimos; unas efluvias invisibles emanan de todas las cosas, y no se trata más que de descubrir su existencia consituyéndose uno mismo en un detector vivo. Una frágil antena permite coptar más fácilmente las radiaciones escondidas; la famosa varilla del zahori. Yo no soy más que un buscador de vibraciones, eso es todo...”
-En 1950, el Gobierno de la República Francesa le concedió la Cruz de Caballero de la Legión de Honor.

-Oye Emilio, ¿de veras tú crees en la radiestesia?

-Claro que sí, hasta tengo mi péndulo.
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