sábado, 26 de abril de 2008

Felicidad

-Emilio, suponte que te encuentras con la lámpara de Aladino y la frotas. ¿Qué le pedirías al genio? ¿Salud, riquezas, fama, gloria, conocimientos científicos? ¿Qué es lo que más deseas en este mundo?

-Todos esos bienes palidecen ante el don más valioso y envidiable de la vida que es: la paz del alma, la tranquilidad interior, en fin: la felicidad.
-Lo que nos impide que tengamos acceso a la felicidad se debe precisamente a causas interiores de nosotros mismos.
-En la búsqueda de la felicidad debemos de efectuar una introspección para encontrar en nuestro interior las causas verdaderas de nuestra infelicidad.
-Puede que nos asuste sostener el espejo que nos hace ver nuestras pálidas y demacradas caras, con más razón no queremos desnudar nuestras almas, temerosos de lo que encontremos en ellas.
-Empédocles, el filósofo griego, contemplando al atormentado mundo, al analizar las aflicciones humanas decía:
"Deseamos la paz interior, pero rehusamos ver hacia adentro".
En consecuencia, desconocemos por completo el mundo interior lleno de misterios, causas ocultas de males visibles, refugio de hondas inquietudes y de deseos frustrados, recriminaciones de conciencia.
-El mundo subjetivo (interior) es de mayor importancia que el objetivo (exterior).
-La fortaleza del espíritu es de mayor trascendencia que la fuerza corporal.
-Marco Aurelio, el más virtuoso de los emperadores romanos, decía:
"El hombre debe estar apuntalado y sostenido desde su interior".
-¿Pero qué me dices de las circunstancias sociales que modifican nuestras reacciones humanas?

-Efectivamente, las condiciones ecónomicas crean trastornos del cuerpo y de la mente de los conjuntos humanos.
La paz social no podrá lograrse de manera estable y permanente mientras el alma del individuo continúe siendo un campo de batalla de una guerra civil.

-Hay gente que tiene hasta tres empleos, que sale a las 7 de la mañana y regresa a su casa a las 10 de la noche. ¡Es imposible que gente así pueda ser feliz! Se trata de un círculo vicioso. ¿Qué se puede hacer?

-La cura a inumerables personas de sus neurosis y conflictos interiores es el que exista un orden social justo. Cierto es que uno no puede controlar muchas cosas, pero si puede empezar por uno mismo. Es preciso aprender a pintar el cuadro exacto de nuestra propia alma, con todas sus imperfecciones y potencialidades, y a diagnosticar acuciosamente las causas de nuestros fracasos, de nuestros odios y temores. Y además debemos darnos cuenta de la existencia de la semilla de nobles impulsos, ideales que existen dentro de nosotros.

-¿Qué propones para crecer internamente?

-Bueno, yo me atrevería a proponerte el plan de los 7 pasos, que sirve para que hallemos el compás que nos mantendrá indefetiblemente en el derrotero de inteligente madurez y mayor autocomprensión. Así dejaremos de ser lo que hemos creído, en el descubrimiento de lo que realmente somos.

-¿Dime qué es el plan de 7 puntos?

-El secreto para ser feliz se guarda en la mente y el corazón, y el gran secreto no es otro que una serie de pasos que debes seguir a lo largo de la vida.
El primer paso, es que debes quererte a tí mismo, y todos los días al levantarte y al acostarte, debes afirmar: yo soy importante, yo valgo, soy capaz, soy inteligente, soy cariñoso, espero mucho de mi, no hay obstáculo que no pueda vencer:
Este paso se llama autoestima alta.
El segundo paso, es que debes poner en practica todo lo que dices que eres, es decir, si piensas que eres inteligente, actúa inteligentemente; si piensas que eres capaz, haz lo que te propones; si piensas que eres cariñosa, expresa tu cariño; si piensas que no hay obstáculos que no puedas vencer, entonces proponte metas en tu vida y lucha por ellas hasta lograrlas.
Este paso se llama motivación.
El tercer paso, es que no debes envidiar a nadie por lo que tiene o por lo que es, ellos alcanzaron su meta, logra tú las tuyas.
El cuarto paso, es que no debes albergar en tu corazón rencor hacia nadie; ese sentimiento no te dejara ser feliz; deja que las leyes de la Naturaleza o como tu le quieras llamar, hagan justicia, y tú, perdona y olvida.
El quinto paso, es que no debes tomar las cosas que no te pertenecen, puesto que, de acuerdo a las leyes de la naturaleza, mañana te quitaran algo de más valor.
El sexto paso, es que no debes maltratar a nadie; todos los seres del mundo tenemos derecho a que se
nos respete y se nos quiera.
El séptimo paso y último, levántate siempre con una sonrisa en los labios, observa a tu alrededor y descubre en todas las cosas el lado bueno y bonito; piensa en lo afortunada que eres al tener todo lo que tienes; ayuda a los demás, sin pensar que vas a recibir nada a cambio; mira a las personas y descubre en ellas sus cualidades y dales también a ellos el secreto para ser triunfadores y que de esta manera, puedan ser felices.
Aplica estos pasos y veras que fácil es ser feliz.
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